jueves, 22 de agosto de 2013

Tus defectos, mi religión.

Deja de mirarte en el espejo y buscar fallos en tu rostro y cuerpo.
Deja de quejarte de que no sabes lo suficiente y por ello pasarte la vida intentando ser más listo.
Deja de querer tener más músculo o estar más ancho.
¿ Es que acaso no lo ves ? la perfección está en ti.
Déjame darte mi ojos sino eres capaz de comprenderlo.
Miro tu cara y adoro cada poro de ella, odias sin razón a tus labios, yo me pasaría la vida besándolos.
Adoro cada manía que tienes, y esa seriedad casi fingida.
Odias todo lo relacionado con el amor, pero yo te enseñaré que el amor puede ser eterno y sobretodo real,
odias las caricias, pero te llenaré de ellas hasta que supliques más.
No intentes cambiar nada de ti, no temas amarme yo sería incapaz de dañarte.
Porque yo amaré cada cosa que odies de ti hasta que aprendas a amarlo por ti mismo.
Porque te daré mi mano y te guiaré cuando no seas capaz de encontrar la salida.
Porque tus defectos son mi religión, y así serán siempre.

2 comentarios:

  1. Amo tu blog, lo sigo desde el año pasado y nunca me canso de entrar y leer todo lo que escribis. Tenes un increíble talento, nunca pares de escribir. Un abrazo. :)

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  2. Ay que ternura eres! muchas gracias Ro, es un orgullo saber que alguien lo lee :)
    Yo no dejaré de escribir mientras haya gente como tu que me lee, muchas gracias en serio.

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