Tal vez el problema sea yo.

A veces me pregunto si soy la única que se siente como yo me siento.
Como si no hubiera lugar en el mundo para mi y cuando creo que lo encuentro ese lugar se rompe con el, me rompo yo.
Como si fuera capaz de hacer que ni una sola persona se quede conmigo hasta final, como si siempre acabara aburriéndoles o encontrando algo mejor.
Sentir que le das mucha importancia a lo que sienten los demás pero notas que los demás no les importa como te sientes tú.
Mirar a esa persona como si fuese todo y que esa persona que mire como si no fueses nada.
No encontrar una amistad pura, esa amistad que sea irrompible sin envidias ni puñaladas por la espalda.
Y entonces reaccionas, ¿ y si el problema no son ellos? ¿ y si el problema eres tú?
llegas a un punto en que te replanteas que tu fallos superan a tus virtudes, tal vez todos tengan razón y no valgo lo suficiente, tal vez todos tengan razón, y simplemente no valga la pena.