Cuídalo, hazlo por mi.

No lo abandones en sus caídas y tristezas.
Hazlo reír siempre que puedas y sino llora con él cuando lo necesite.
Trátalo como si no hubiera mañana, y recuerda que chico como él no encontrarás.
Abrázalo y dile que le amas, aprecia sus defectos y alaba sus virtudes.
Recuerda que es no es un chico que suele expresar lo que siente, así que tendrás que adivinarlo al analizar sus miradas y sonrisas, ellas te darán la respuesta a sus estados de animo.
Agárrale de la mano y sonriele para que sepa que no está solo.
Escucha sus aventuras y nunca dejes de que abandone su preciada libertad.
Apóyalo para que consiga sus metas, y cada día trátalo como un rey.
Por favor, quiérelo y ámalo, ya que tu puedes.
Si está celoso, no pases de él, es más, hazle ver que tus ojos le pertenecen a él.
Consigue lo mismo que conseguí yo en su momento, te reto a ello.
Y... si por casualidad pregunta por mi, dile que le quiero.